Grupos brillantes vs. Equipos Fascinantes

Tienen un objetivo común:

Los grupos brillantes saben que tienen que avanzar para sobrevivir. Los equipos fascinantes son aquellos que saben por lo que trabajan y tienen un objetivo consensuado, medible, retador, alcanzable, concreto, temporalizado y alineado con los intereses particulares de cada miembro.

Conocen el sentido de su existencia:

Los grupos brillantes intuyen que juntos pueden conseguir mejores resultados. Los equipos fascinantes saben definir perfectamente para qué existen, cuál es la necesidad que cubren y qué es aquello que les hace imprescindibles.

Cimentan su trabajo en sus valores:

Los equipos brillantes toman decisiones lógicas. En equipos fascinantes sus miembros ponen el foco en aquellos valores que les unen y sus actos están guiados por la coherencia con los mismos y el sentido de transcendencia de sus trabajos.

Trabajan por proyectos:

Los equipos brillantes organizan el trabajo de los miembros de su organización. Los equipos fascinantes son generadores de otros proyectos y saben delegar la consecución de objetivos menores y ponerlos en manos de otros. Utilizan este método como estrategia para alcanzar sus fines.

Se sirven de sus diferencias:

Los equipos brillantes utilizan sus diferencias para repartir tareas. En los equipos fascinantes coexisten distintos tipos de personalidades complementarias que no sólo se aceptan, sino que se consideran necesarios. La diferencia, puesta en valor no suma, sino que multiplica.

Son flexibles:

Los equipos brillantes realizan sus tareas de forma efectiva. Los equipos fascinantes son aquellos que rotan constantemente sus roles y tareas para, de esta forma, tener una visión global y sistémica de su cometido.

Trabajan desde la confianza:

Los equipos brillantes gestionan desde el control y la vigilancia de la tarea, perdiendo en ocasiones el foco en la misma. Los equipos fascinantes trabajan desde la confianza, lo que facilita a cada uno de sus miembros poner foco y atención en su propio cometido, confiando en que todas las piezas encajarán.

Para ellos no existe el fracaso sino el aprendizaje:

Los equipos brillantes buscan la perfección y, al ser ésta utópica, en ocasiones se desmotivan, se sienten frustrados y caen en el resentimiento. Los equipos fascinantes tratan de hacer lo mejor posible y conciben el error como una oportunidad de aprendizaje y crecimiento. Lo importante para ellos no es la meta, sino el camino.

Sienten orgullo de pertenencia:

Los equipos brillantes luchan por conseguir sus objetivos. Los equipos fascinantes se sienten los mejores, se saben con derecho a formar parte de su organización, celebran sus éxitos, defienden sus colores y se comprometen de forma leal con su organización.

10º Son aquellos que se aman:

Los miembros de un equipo brillante se respetan. Los miembros de los equipos fascinantes actúan desde el amor por el otro. Se dan al otro desinteresadamente y quieren lo mejor para el otro, obteniendo de esta forma lo mejor también para sí mismos.